Técnica de análisis cuantitativo de los diversos componentes que integran el tejido óseo mediante métodos manuales, semiautomáticos o automáticos. La histomorfometría ósea permite calcular, en una biopsia, una amplia serie de parámetros estáticos y dinámicos. Los estáticos se obtienen midiendo las diferentes estructuras en los cortes teñidos. Los dinámicos se obtienen mediante el marcaje con tetraciclinas, que permite introducir el factor tiempo en las mediciones. Este antibiótico, que es fluorescente cuando se ilumina con luz azul-violeta, se une al fosfato cálcico amorfo de los frentes de mineralización.