También llamado ablación con láser, es un método térmico para inducir necrosis coagulativa que se ha usado para ablación percutánea de tumores sólidos en digestivo, en oftalmología, etc.
Para este método, se insertan finas fibras ópticas flexibles en el tumor, a través de agujas colocadas por vía percutánea, bajo control de técnicas de imagen.