Causada por la Rickettsia rickettsii (R. Rickettsii), que es transportada por garrapatas. La bacteria se disemina a los humanos a través de una picadura de estos insectos.
En el oeste de los Estados Unidos, la bacteria es transportada por la garrapata Dermacentor andersoni, y en el este, por la garrapata Dermacentor variabilis. Sin embargo, otras garrapatas diseminan la infección en el sur de los Estados Unidos, al igual que en Centro y Suramérica.
Contrario al nombre de “Montañas Rocosas”, los casos más recientes han sido notificados en el este de los Estados Unidos, incluyendo los estados de Carolina del Norte y del Sur, Virginia, Maryland, Georgia, Tennessee y Oklahoma. La mayoría de los casos se presenta en la primavera y en el verano, con un promedio de 1,000 casos denunciados por año. La mayoría de los casos reportados se han dado en niños.
Los factores de riesgo comprenden caminatas o exposiciones recientes a las garrapatas en un área en donde se sabe que se presenta la enfermedad. Es improbable que la bacteria se le transmita a una persona por parte de una garrapata que esté adherida por menos de 20 horas.
Los síntomas generalmente se desarrollan alrededor de 2 a 14 días después de la picadura de la garrapata y pueden ser:
Otros síntomas que pueden estar asociados con esta enfermedad son: